En general, el ahorro energético de puertas y ventanas se refleja principalmente en la mejora de su aislamiento. En las zonas frías del norte, el ahorro energético se centra en el aislamiento, mientras que en las zonas de veranos cálidos e inviernos templados del sur, se prioriza el aislamiento, mientras que en las zonas de veranos cálidos e inviernos fríos, se debe considerar tanto el aislamiento como el aislamiento térmico. La mejora del aislamiento térmico de puertas y ventanas puede considerarse desde los siguientes puntos de vista.
1. Fortalecer el rendimiento del aislamiento térmico de puertas y ventanas.
Este estudio se centra en los edificios existentes en el sur de China, como las zonas con veranos calurosos e inviernos fríos, y las zonas con veranos calurosos e inviernos cálidos. El aislamiento térmico de puertas y ventanas se refiere principalmente a su capacidad para bloquear la radiación solar y evitar que entre en la habitación durante el verano. Los principales factores que afectan al aislamiento térmico de puertas y ventanas incluyen el rendimiento térmico de los materiales, los materiales de las incrustaciones (generalmente vidrio) y las propiedades fotofísicas. Cuanto menor sea la conductividad térmica del material del marco de la puerta y la ventana, menor será la conductividad térmica de la puerta y la ventana. Para las ventanas, el uso de diversos vidrios o películas termorreflectantes especiales tiene un buen efecto, especialmente la selección de materiales reflectantes con una fuerte capacidad de reflexión infrarroja en la luz solar, como el vidrio de baja radiación, es ideal. Sin embargo, al seleccionar estos materiales, es necesario considerar la iluminación de la ventana y no mejorar el aislamiento perdiendo la transparencia de la ventana, de lo contrario, su efecto de ahorro de energía será contraproducente.
2. Reforzar las medidas de sombreado dentro y fuera de las ventanas.
Para cumplir con los requisitos de diseño del edificio, la instalación de parasoles exteriores y parasoles, así como el aumento adecuado de la longitud del balcón orientado al sur, pueden lograr un efecto de sombreado específico. Se instala una cortina de tela termorreflectante recubierta de una película metálica en la cara interior de la ventana, con un efecto decorativo en la parte frontal, creando una capa de aire de unos 50 mm entre el vidrio y la cortina, que facilita la circulación del aire. Esto logra una buena reflexión térmica y un buen efecto aislante, pero debido a la poca luz directa, se recomienda su uso en persianas móviles. Además, la instalación de persianas con un efecto de reflexión térmica específico en la cara interior de la ventana también puede lograr un efecto aislante específico.
3. Mejorar el rendimiento de aislamiento de puertas y ventanas.
Mejorar el aislamiento de puertas y ventanas exteriores de edificios se refiere principalmente a aumentar su resistencia térmica. Debido a la baja resistencia térmica de las ventanas de vidrio monocapa, la diferencia de temperatura entre las superficies interior y exterior es de tan solo 0,4 °C, lo que resulta en un bajo aislamiento. El uso de ventanas de vidrio doble o multicapa, o vidrio hueco, aprovechando la alta resistencia térmica de la capa de aire, puede mejorar significativamente el aislamiento térmico de la ventana. Además, la selección de materiales para marcos de puertas y ventanas con baja conductividad térmica, como plástico y metal tratado térmicamente, puede mejorar el aislamiento de las puertas y ventanas exteriores. En general, la mejora de este rendimiento también mejora el aislamiento.
4. Mejorar la hermeticidad de puertas y ventanas.
Mejorar la hermeticidad de puertas y ventanas puede reducir el consumo energético generado por este intercambio de calor. Actualmente, la hermeticidad de las puertas y ventanas exteriores de los edificios es deficiente, por lo que es necesario mejorarla mediante la producción, instalación y colocación de materiales de sellado. Al diseñar, este indicador puede considerarse con base en una tasa de intercambio de aire higiénico de 1,5 veces/h, lo que no requiere necesariamente que las puertas y ventanas sean completamente herméticas. En los edificios de la región norte, mejorar la hermeticidad de puertas y ventanas tiene un impacto significativo en la reducción del consumo energético de calefacción en invierno.
Hora de publicación: 07-jun-2023